Cada año se instalan al lado de mi casa unas vecinas cuya compañía resulta realmente grata. Aportan alegría y colorido a los campos y son preludio de días luminosos y cálidos.
Sus nombres son éxoticos, de auténtica diva: Amapolas, achicoria, adormidera cornuda, pie de liebre, ophrys balearica, orchis conica ...